El retargeting es como esa notificación molesta, pero útil, que te recuerda lo que dejaste pendiente. Un recordatorio que le dice a tu cliente: “¡Hey, volvé! Sabemos que te gustamos y aún nos querés comprar”. No es magia, es estrategia. 

Pero bueno, vamos a lo que importa: ¿cómo hacer que los que ya te espiaron regresen a tu sitio web para concluir la compra?

1. Conocé a tu público

Tenés que saber quién es tu audiencia y por qué desaparecen antes de convertir. ¿Estaban cerca de comprar y abandonaron? ¿Dónde los perdiste? Analizá bien el comportamiento: cuánto tiempo pasó en el sitio, qué productos vieron, si llegaron al sitio desde otros canales, entre otras cosas. La clave está en hablarles como si los conocieras de toda la vida, pero sin ser tan invasivos. ¡Construí el Customer Journey!

2. Anuncios específicos

En este punto, el retargeting se luce. ¿Alguien miró un producto y no lo compró? ¡Perfecto! Le enviarás un anuncio con ese producto persiguiéndolo por redes sociales, YouTube, Google Display o por donde sea. No es un aviso invasivo, es estratégico pensado para convertir en el momento justo.

3. Carritos abandonados, el dolor de cabeza de todos

El clásico: llenan el carrito y lo dejan ahí, como si fueran a volver. Pero sabés que eso no pasa. Aquí es donde el retargeting debe brillar, los anuncios dinámicos con ese carrito abandonado, y si le suma un pequeño incentivo como un pequeño descuento. Hay que entender que la urgencia es clave, no podés permitir que piensen dos veces la compra que realizarán.

Según Search Engine Jornal (SEJ), realizar un 10% de descuento en el producto genera una fidelización en los clientes. Ofrece tanto una acción específica como un objetivo específico por el cual realicen la compra.

4. No te enamorés de una sola plataforma

Es crucial diversificar la estrategia. Si pensás que Google Ads es todo lo que necesitás, estás haciendo las cosas mal. Facebook, Instagram, LinkedIn y otras plataformas son minas de oro para el retargeting. En LinkedIn podrás apuntar a esos ejecutivos que vieron tu página, y en Facebook podrás cargar listas de usuarios para recordarles que aún están a tiempo de comprar. Cuantas más plataformas te hagas presente, más cerca estás de la conversión.

Hay que tener en claro que no todos los canales tienen el mismo objetivo:

• Para involucrar y desarrollar la audiencia se recomienda estar presente en Spotify, YouTube TV, Amazon, entre otros. 
• Para mantener la audiencia comprometida se debe utilizar Reddit, Facebook o LinkedIn.
• Para convertir debemos estar presentes en las mismas plataformas que para nutrir y, por supuesto, en Google Ads.
• Para generar un mayor engage y maximizar el valor del cliente debés tener en cuenta a LinkedIn, Google Ads y Facebook.
• Para convertir a los clientes en leads debés estar en YouTube, Twitter (X) y Facebook.

5. Personalización + datos= conversión garantizada

No hay peor error que enviar un mensaje genérico al cliente. Usá los datos a tu favor: ¿qué productos miraron? ¿Qué historial tienen contigo? Ofrecé exactamente lo que están buscando, de una manera que sientan que les hablás únicamente a ellos. La personalización es la magia que tiene el retargeting. En una época manejada por la IA, el contacto humano es el más poderoso.

6. El problema de los banners

Si tus anuncios empiezan a percibirse anticuados, tenés un gran problema. Debés evitar la “ceguera de banner”, probando diferentes formatos y canales. Esto pueden ser: vídeos, imágenes disruptivas o mensajes con fuertes CTAs. Hacé que tus anuncios sean imposibles de ignorar.

Para ello, debés seguir estos puntos:

• Evitar que parezca un anuncio.
• Probar anuncios en video.
• Tener en claro tu audiencia.
• Utilizar publicidad nativa.
• Incluir elementos interactivos.

7. FOMO, el miedo a perderse algo

FOMO son las siglas de “fear of missing out”, es decir, “miedo a perderse algo”. Debés usar la escasez y la urgencia a tu favor, generando ofertas por tiempo limitado o productos exclusivos que hacen que tu cliente se decida rápido. Pero no abusés, porque si lo hacés reiteradas veces en un lapso de tiempo corto, vas a perder credibilidad.

La clave es concentrarse en el problema o deseo del cliente y pensar en algunas formas de poder jugar con el contenido emocional. Algunas emociones positivas, como la esperanza y el alivio, pueden ser utilizadas para conseguir los objetivos.

El retargeting no es complicado de llevar a cabo, pero necesitás plantear una buena estrategia. Con la segmentación adecuada, un mensaje personalizado y un incentivo continuo, podrás reconectar con esos visitantes que pensaron que podrían ignorarte y convencerlos de que ahora es el momento de ejecutar la compra. 

El secreto está en la persistencia, la creatividad y en nunca perder el foco. ¡Ahora salí ahí y recuperá esos leads como un profesional!

Si estás pensando en realizar una estrategia, pero no sabés por donde comenzar, agendá una asesoría con uno de nuestros profesionales y conocé Marketing Velocity.